Una larga historia
Una familia con mucha tradición
En esta propiedad, que data del siglo XIV, se ha cultivado la viticultura de manera ininterrumpida desde muy antiguo. La crisis de la filoxera llevó a esta finca a un largo período de decadencia, pero en el 2001, Manel Avinyó, descendiente de la familia propietaria, inició un ambicioso proyecto para devolver a la propiedad su esplendor perdido. Con su masía del siglo XIV, rodeada de sus viñedos y de bosque, es un auténtico Château Mediterráneo.